EL REINO DEL POLVO Y DE LA NATA

Esto que parece el título de una pelicula porno es en realidad el nombre que mi señora y yo cariñosamente le dimos a la estación de Formigal de la que regresamos ayer mismo. Las suaves colinas de algunas zonas de la estación hacian que vista desde la parte alta pareciera una interminable sucesión de montones de nata espolvoreadoa de azucar glass de ahí el nombrecito que le pusimos. Todos los que amamos la nieve tenemos un sueño, despertarnos una mañana y tener una estación de esquí solo para nosotros, cubierta de nieve polvo y con el sol brillando en el cielo, pues ese sueño se nos hizo realidad por partida cuadruple durante esta semana y es que desde el lunes que llegamos a Formi empezaba a nevar durante la noche y paraba casi de amanecida para ir despejando poco a poco y a eso de las nueve de la mañana cuando llegabamos a pistas el sol empezaba a asomar para terminar regalandonos todos los dias unas jornadas de powder para el recuerdo, vamos ni encargándolo nos hubiera salido mejor. (Mi menda en plena faena) Durante el martes, miercoles y jueves casi puedo decir que "desvirgabamos" las pistas de Formi ya que a veces eramos los primeros en destrozar las marcas de las pisapistas y el jueves fué el "summum" porque encima de la nieve pisada durante la noche aparecieron unos 40 cmtrs. de nieve polvo que hicieron que a eso de las 14:00 tuvieramos que dejarlo porque teniamos las piernas literalmente rotas de ir enterrados hasta por encima de las botas. (Observese la cara de felicidad de mi costilla en pleno extasis nival)Luego el viernes fuimos a conocer Panticosa que la teniamos a unos escasos 20 minutos en coche y fué otro gran acierto, porque nos dijeron que Formi se había llenado bastante de gente y en Panti estuvimos solos hasta el punto de bajar pistas sin ver a un solo esquiador. Esta estación aunque más pequeña es preciosa, sobre todo la zona de Sabocos donde puedes bajar pistas que te llevan bordeando bien el ibón (lago) de Sabocos o el de Asnos y al estar el agua congelada y cubierta de la nieve caida dejaban en la retina una imagen alucinante dificil de olvidar. (El ibón de Sabocos desde la pista Ibón I) El sabado fuimos a despedirnos de las pistas de Formigal pero el orbayu y una buena cantidad de gente (flipante como se llena el pueblo el fin de semana) deslucieron un poco el adios, pero no todo iba a ser perfecto, ya sería mucho pedir. A parte del tema nieve también me gustaría comentar el buen ambiente que hay en el pueblo de Formigal y lo "maja" que es en lineas generales la gente de aquellos lares cosa que ya habiamos comprobado en anteriores aventuras por Huesca pero que nunca está de más reseñar. Ahora de vuelta en casa de nuevo a pelearse con el curro y la rutina para juntar unos dinerillos y soñar con poder volver algun dia al reino del polvo y la nata. (Ya sabeis click en las fotos para agrandar y bla,bla,bla...) Saludos.